El 18 de enero, me dirigí al área de ocio y compras de West Park en Alcorcón. Quedé asombrado por la enorme concentración de vehículos y el sonido ensordecedor de sus sistemas de música y el vidrio que rodeaba esta reunión masiva.
Este fin de semana, se convocó a una nueva concentración de vehículos no autorizados en Park West. Sin embargo, esta vez, un mayor número de fuerzas policiales locales y nacionales lograron disuadir a los participantes.
Dos semanas antes, miles de vehículos se aglomeraron en las calles de Parque West con música a todo volumen, botellas y basura. Todo esto frente a aquellos que intentaban hacer sus compras o cenar en las diferentes unidades de esta zona de Alcorcón.
Las críticas de vecinos, sindicatos profesionales y el Sindicato de Policía Local asociado (PL) se unieron por el dispositivo organizado por la sede del cuerpo para la concentración no autorizada mencionada anteriormente.
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Los sindicatos denunciaron que «solo se asignó un refuerzo de cuatro agentes de la policía municipal para controlar a varias miles de personas convocadas», por lo que el dispositivo «resultó completamente disfuncional, casi sin presencia policial», lo que tuvo un efecto llamativo en los participantes de la concentración.
Las fuentes municipales informaron a Efe que el dispositivo desplegado en esta ocasión en Parque Oeste «fue similar a otros previamente implementados, donde se logró disolver las concentraciones ilegales fuera de los términos municipales».
La Policía Municipal de Alcorcón inició una investigación para identificar a los organizadores de esta iniciativa. Se tomaron medidas al respecto y, gracias a labores de prevención, se evitó una nueva concentración de vehículos no autorizados este fin de semana, según confirmaron las fuentes municipales.
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En esta ocasión, un dispositivo especial de 8 oficiales de policía municipal en coordinación con cuatro agentes de la Policía Nacional lograron evitar la concentración no autorizada de vehículos.
Se realizaron controles de alcohol y drogas y se revisó la documentación. Los participantes se dispersaron al ver la presencia policial.
Ante la posibilidad de que la concentración se trasladara al municipio de Leganés, la policía de Alcorcón contactó con la Policía Local de Leganés y coordinaron acciones para evitar la migración de vehículos allí.