
El Ayuntamiento de Alcorcón ha creado una nueva herramienta para combatir la suciedad en las calles generada por los excrementos caninos.
Se trata de un mapa de zonas ‘calientes’ donde se acumulan las deposiciones de perros no recogidas. Esta iniciativa surge de una propuesta presentada por los empleados de la empresa de limpieza municipal, Esmasa, a través de su departamento de innovación.
Cuando se detecta un excremento sin recoger, el personal lo registra en una aplicación indicando la ubicación, la hora y el día, alimentando así una base de datos que actualiza automáticamente el mapa.
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De esta manera, según el Consistorio, se pueden identificar zonas recurrentes donde se producen estos comportamientos incívicos, lo que facilitará optimizar las rutas de limpieza, promover campañas de concienciación e incluso reforzar la vigilancia policial.
La segunda teniente de alcaldesa y vicepresidenta de Esmasa, Raquel Rodríguez, ha destacado que, a pesar de los esfuerzos de la empresa pública por mejorar la limpieza de la ciudad, «sin la colaboración ciudadana, este problema persistirá».
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«Además de ser una falta de respeto hacia el resto de vecinos y vecinas de la ciudad, no recoger estos excrementos puede conllevar una multa de hasta 750 euros«, agregó.